La
sangre de la tauromaquia aún corre con mucha intensidad por las venas de
Catalunya. Cardona (Barcelona), un precioso pueblo con una tradición
taurina que se remonta a seis siglos, sigue viviendo la tauromaquia con
toda la pasión y el romanticismo que siempre ha tenido el viejo Arte de
Cúchares.
Este año, a pesar de la lluvia, se vivió con
más intensidad que nunca un fin de semana taurino de entrega total de
los espectadores. Se celebraron dos festivales, sábado y el domingo, con
toros del ganadero Daniel Martín y la actuación de los toreros
catalanes: Jesús Fernández, Francisco Hidalgo y Antonio Arrebola, junto al novillero colombiano-francés, Santiago Sánchez Mejía.
Cardona
es un lugar taurinamente particular porque sus festejos aún guardan el
romanticismo de años que se recuerdan con mucho sentimiento, pues su
plaza de toros es muy peculiar; cuadrada y de cuyas barreras cuelgan
cuerdas con nudos a lo largo para que sus aficionados puedan vivir más
de cerca las envestidas de los toros al salir a la arena. En el pueblo
hay personas con sensibilidad, carisma, cariño y sobre todo respeto al
torero y a la Tauromaquia.
El sábado por la noche torearon Jesús Fernández y Francisco Hidalgo,
durante todo el día llovió y el ruedo era un auténtico barrizal, pero
esto no impidió para que la Tauromaquia se viviera de nuevo en Catalunya
y a las 8 de la noche inicio el paseíllo Jesús Fernández,
un novillero con mucho oficio y experiencia, le correspondió una res de
comportamiento desigual que embestía por oleadas, lo toreó muy bien con
el capote haciendo sonar la música. Luego en la muleta todo se fue
viniendo abajo pues el novillo no permitió la construcción que Jesús
quería dar a la faena el novillo, dibujó pese a todo, buenos muletazos
con la mano izquierda y el premio fue una vuelta al ruedo.
Francisco Hidalgo
toreó un novillo con mucha más energía, que tenía transmisión al
envestir y le sirvió para expresar su toreo. El ruedo se hallaba en mal
estado y a se sentía el peligro. Francisco sufrió varias volteretas pero
no se afligió, al contrario saco su raza, el público vivió la faena con
la pasión que le puso el novillero y su labor fue recompensada con dos
orejas.
El domingo fue otra cosa. Un día soleado, mucha más gente
en el pueblo y las calles llenas de sonrisas, ilusión y de ansias por
que comenzara el festejo. A las cinco y media de la tarde se inició el
paseíllo y entre las personas que cubrían las tablas de la plaza se vio
al gran torero Serafín Marín.
En primer lugar toreó Santiago Sánchez Mejía
que derrochó torería, arte y ganas frente a un buen novillo al que
lanceó suavemente a la verónica, encajando la figura en cada pase y
conectando inmediatamente con el público. La faena tuvo explosión desde
el principio y fue el comienzo de una gran obra que brindó al público,
dejándose puesto el sombrero cordobés de manera muy agitanada. Con la
muleta, toreó por ambos pitones ejecutando tandas muy estéticas a un
novillo que fue desarrollando sentido, al final de la faena sufrió dos
volteretas muy aparatosas pues el animal lo acorraló entre las tablas,
pero el colombiano se levantó de cada una como si nada hubiera pasado.
Finalizó la faena con muletazos muy toreros y la gente agradeció su
actuación con un mar de aplausos, pañuelos y gritos de ¡torero , torero,
torero! Le otorgaron las dos orejas y el rabo.
Antonio Arrebola
actuó en segundo lugar, cuando la felicidad había invadido a todos los
presentes. El torero estaba seducido también y toreo con temple y
alegría al novillo que tuvo el mejor comportamiento del fin de semana,
cuya nobleza y fijeza se mezclaron con las ganas, el oficio y la pureza
con la que toreó Arrebola, que desarrolló casi toda su labor con la mano
izquierda pues se sintió muy a gusto con las embestidas del toro por
ese pitón. Fue una faena larga que se coreó con ¡olés! y ese entusiasmo
que siempre han mostrado los catalanes con el buen toreo. Al final le
otorgaron las dos orejas y el rabo y salió en hombros junto al
colombiano entre gritos de éxtasis de la multitud.
Fichas de las dos novilladas
Sábado 7 de septiembre. Lleno en los tendidos. Novillos de Daniel Martín.
Jesús Fernández, vuelta al ruedo.
Francisco Hidalgo, dos orejas.
Domingo 8 de septiembre. Lleno en los tendidos. Novillos de Daniel Martín.
Antonio Arrebola, dos orejas y rabo.
Santiago Sánchez Mejía, dos orejas y rabo.
José María Alarcón Pubill