Jiménez Fortes, a hombros en Salamanca

Jiménez Fortes cortó una oreja a cada uno de sus oponentes, unos toros de El Pilar que no dieron mucho juego. Manzanares cortó una única oreja y Morante terminó con una bronca.

  
Plaza de toros de Salamanca, domingo 16 de septiembre de 2012. Con calor ligero viento y ¾ de entrada, se han lidiado toros de El Pilar, justos de presentación. Se desechó el primero por inválido, siendo sustituido por otro de la misma ganadería. 1º noble y flojo; 2º bravo, noble y boyante; 3º noble y flojo; 4º noble, flojo; 5º bravo y noble; 6º noble y flojo.

Morante de la Puebla, ovación y bronca.
José María Manzanares, oreja y ovación.
Jiménez Fortes, oreja y oreja. Salió a hombros por la puerta del toro.

Se decía por os mentideros taurinos que era el cartel mas rematado del ciclo ferial, y junto a la ganadería una garantía de éxito; fue muy flojo el encierro, y, la cosa no llegó a mayores, aunque hubo cosas importantes.

La parroquia quiso ver torear de capa a Morante, y éste salvo alguna pincelada, quedó inédito. En su primero de pastueña embestida logro el sevillano meterlo en faena, primoroso de inicio y luego con derechazos de mucho sabor, y naturales bien rematados, tiro de la agónica embestida, con mucho temple, no era fácil sacarle faena, pero lo consiguió, luego al matar pinchazo, entera trasera con dos avisos y ovación.
En su segundo muy deslucido, cara alta y sin continuidad en la muleta, le sacudió por las orejas, y entró a matarlo de “aquella manera”, mal muy mal. Sonora bronca.

Manzanares sorteó el mejor de la tarde toro de boyante embestida, bien picado por Barroso y soberbios palos de Trujillo, desmayados de inicio por el pitón derecho con mucho empaque y gusto jugando la cintura, el toro la tomaba con clase, bajó al natural con una sola serie, toreo bien pero, en mi opinión Manzanares aún no está en el punto antes de su retirada. Puso entrega y el alma en la estocada entera, y paseó una oreja.
Su segundo lanceado con exquisito gusto, hizo una pelea en varas brava empujado y levantando al montado se agarró bien “Chocolate”, que fue ovacionado al retirarse, pero el bravo animal dejó allí toda su codicia y en la muleta llegó muy parado. Faena limpia y sosegada pero a falta de ingredientes vitales. Enterró el estoque y cobró una fuerte ovación.

Cerro la terna Jiménez Fortes, que había sonado mucho desde el año anterior, y no fue de convidado en el cartel, sobrado de valor, tropezó en su primero al torear de capote, y se temió lo peor, tan solo fue un golpe. Muy torero toda la tarde, brilló en sus toros con el capote  con ajustadas chicuelitas. A su primero le tragó y consintió firme de planta y en un sitio de riesgo continuo, se vio el valor a raudales del malagueño. Tiró de una perezosa embestida por ambos pitones. Lo remató en las cercanías, con aplomado valor y cortó una merecida oreja.
Salió fresco, y con fuerza a buscar su segundo apéndice en el que cerraba plaza, lo sacó toreado a los medios y consintió una faena de mano baja, marcando los tiempos y llevando largo a su oponente. Faena limpia y consecuente que remató con ajustadísimas “manoletinas”, y un pulso de valor entre los pitones. Mató de entera delantera y cobró otra oreja que le otorgó salir en volandas.

Y aquí terminó todo a falta de ese día 21- San Mateo, para los amantes del toreo a caballo y el arte del rejoneo. Pero servidor lo deja aquí, hasta una nueva feria, que estemos aquí para contarlo, según lo vi.

Texto: Fermín González
Fotografía: JM García/EFE