El aguascalentense Fabián Barba (azul rey y oro) el cual escuchó división y silencio y el madrileño David Mora (palo de rosa y oro) el cual confirmó su alternativa española, con división y aplausos con astados de Marco Garfias, desiguales en presentación y comportamiento.
El capitalino Manolo Mejía, que nació el 21 de mayo de 1965 en la Ciudad de México; y tomo la alternativa en León, Guanajuato el 22 de enero de 1983 con astados de San Martín, teniendo como padrino al regiomontano Eloy Cavazos y como testigos, Antonio Lomelín y Miguel Espinosa "Armillita". Confirmo su alternativa en la Plaza México el 27 de enero de 1985 con Antonio Chenel "Antoñete" y Eloy Cavazos con toros de De Santiago y confirmo su alternativa mexicana en la Plaza Monumental de las Ventas de Madrid el 3 de julio de 1994 con Jorge Manrique y Julio Norte con bureles de José Escolar, se despidió de los ruedos con dos toros, el primero Cuijo, número 23, cárdeno obscuro bragado meano y cornidelantero con 480 kilos al cual recibió con mandíles en los medios, rematados con una media para cartel. Le brindó a su señor Padre, para iniciar su penúltimo trasteo con estatuarios en tablas y muletazos por ambos pitones, rematados con cambiados de manos, en una faena torera y pinturera, malograda con la espada, tres pinchazos y estocada para escuchar aplausos. Se cortó la coleta con Alicoche, número 17, cárdeno obscuro bragado meano y cornivuelto tocado del izquierdo con 480 kilos al cual veroniqueó y saltó al callejón poniendo en aprietos a los monosabios que se tiraron de cabeza al albero; quitó por chicuelinas y después de brindar al cónclave capitalino y bajo las melancólicas notas de Las Golondrinas, una faena de un maestro del toreo con muletazos de todas marcas, finiquitada de pinchazo en todo lo alto y estocada para cortar una oreja que le otorgó el juez de plaza don Jorge Ramos y le entregó el alguacilillo Arturo Ramos. Después de dar dos aclamadas vueltas al ruedo, sus dos hijos y su padre le cortaron la coleta.
Confirmó su alternativa David Mora con Miel de Penca, número 14, cárdeno claro bragado meano caribello y cornivuelto con 470 kilos, verónicas despatarrándose y buen quite por chicuelinas. Le confirmó su alternativa española Manolo Mejía, para hacer un trasteo doblándose con el burel de las tablas al tercio y ahí, derechazos largos y templados, y con la siniestra una serie de naturales en el mismo tenor y otra más ya sin eco en el tendido por lo cual se fue tras el acero dejando una estocada caída para escuchar división.
Con el que cerró plaza Agavero, número 41, cárdeno obscuro bragado meano caribello y cornivuelto con media tonelada en los lomos, gaoneras con el percal y con la pañosa, una faena empeñosa a un toro rebrincón que sabía lo que dejaba atrás y que para colmo de males volvía contrario y que culminó de estocada y certero descabello para escuchar palmas.
Fabián Barba con Colonche, número 5, aldinegro bragado y acucharado con 495 kilos, lo recibió con dos faroles de hinojos en la misma boca de riego y de pie, verónicas y chicuelinas en el mismo sitio; bregó hacia el caballo y lo quitó por ajustadas gaoneras. Brindó a todos por hacer un trasteo con muletazos por alto en los medios en una faena llena de entrega y torerísmo que no entendió el tendido, culminada de pinchazo y estocada para escuchar división.
Con Cardenche, número 26, cárdeno claro bragado meano y paliabierto con 493 kilos, al cual con el percal le hízo un quite por tafalleras molestado por el viento otoñal del Valle de México. Con la muleta, derechazos y naturales en la puerta de arrastre a un toro que no humillába y que culminó de estocada para escuchar silencio y pitos al toro en el arrastre.
El público salió contento de la Monumental de Insurgentes por la feliz despedida de Manolo Mejía.
Texto: Alejandro Escárcega
Fotografía: Monumental Plaza México
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