11 de febrero de 2013

José Mauricio y Mario Aguilar cortaron oreja en La México

El rejoneador Leonardo Hernández, sin suerte, no tocó pelo. Mostró voluntad pero no pudo repetir la actuación de su debut en el coso de Insurgentes.
En la décima octava corrida de la Temporada Grande 2012-2013 en la Monumental Plaza de Toros México. Un tercio de entrada en una tarde templada se corrió un buen encierro de la ganadería queretana de Barralva, propiedad de los Hermanos Álvarez Bilbao, de los cuales seis fueron aplaudidos y uno pitado.
Leonardo Hernández (rejones), palmas y silencio.
José Mauricio, al tercio en su lote y regaló uno al cual le cortó la oreja.
Mario Aguilar (foto), oreja del tercero y silencio en el sexto.

Abrió el festejo el rejoneador Leonardo Hernández (corto azabache y gris) con "Sibarito", numero 59, negro bragado y cornivuelto con 531 kilos, montando a "Cairel" dejó dos rejones. Con "Templario", tres banderillas dando vueltas de 360 grados. Con "Xalope", dos banderillas y tres cortas al relance y con "Travieso" dejó un rejón de muerte trasero para escuchar palmas toro y rejoneador.
Con "Madrax", número 21, cárdeno obscuro, bragado, meano y cornivuelto con 480 kilos, montando a "Verdi", banderillas al quiebro. Con "OH31", dejó una solitaria banderilla. Con "Xarope", banderillas a dos manos y tres cortas al violín; ayudado por su hermano, el banderillero Nicolás Hernández, bregando al burel de Barralva. Y con "Travieso", dos rejones para escuchar silencio y aplausos al tiro en el arrastre.

José Mauricio (obispo y oro) con "Cantinillo", número 152, negro zaino y cornivuelto con 465 kilos, poco con el percal de recibo y un espléndido puyazo de Erik Morales. Quitó por gaoneras en los medios y con la pañosa, estatuarios en tablas y derechazos citando de largo. Con la siniestra, largos naturales, finiquitó su trasteo con manoletinas y con el acero dejó una estocada caída para saludar en el tercio y aplausos al toro.
A "Farolero", número 183, negro zaino y cornivuelto, tocado del izquierdo con 510 kilos, bien con el percal, verónicas y medias. Sin brindar su faena, muletazos de tanteo del tercio a los medios y ahí, pases a media altura a un toro débil al cual finiquito de estocada para saludar en el tercio y pitos al toro en el arrastre.
Regaló a "Clavijero", número 161, negro zaino y cornivuelto con 470 kilos, variado con el percal: verónicas, chicuelinas, gaoneras, saltilleras y revolera. Brindó a todos, para muletearlo estoicamente por alto y después le corrió la mano con tersos pases por ambos pitones y se adornó con ajustadas bernardinas. Con la toledana dejó un estocadón hasta los gavilanes para cortar una merecida oreja que le otorgó el juez de plaza don Jorge Ramos Sandoval y le entregó el alguacilillo Armando Ortega.

Mario Aguilar (rosa y oro) a "Cardicito", número 153, negro bragado y delantero montado con 465 kilos, lo veroniqueó de recibo y lo brindó al conclave capitalino para recetarle dos péndulos en los medios y ahí, largos y templados derechazos ante el delirio del tendido y naturales aguantando horrores, fulminados de una estocada para cortar una oreja que le entregó el alguacilillo Saúl Rivera.
A "Malagueño", número 165, colorado rebarbo ojo de perdiz y cornivuelto con 475 kilos, lo recibió con verónicas y chicuelinas entreverada; quito por chicuelinas. Con la pañosa, un trasteo con muletazos en las tablas y derechazos en la puerta de arrastre a un toro fijo y bravo. Con la siniestra, naturales en la puerta de cuadrillas sin acomodarse, por lo cual volvió a la diestra, para ahí torearlo en la querencia y con el acero, media y descabelllo para escuchar silencio y aplausos al toro.

Se despidió el monosabio don Alfonso López, después de 26 años de labor en los ruedos al final de la lidia del quinto toro.

Para la última corrida de la Temporada la Empresa anunció que vendrán, el rejoneador navarro Pablo Hermoso de Mendoza, con dos toros de Los Encinos y los matadores Alejandro Talavante, Fermín Spínola y Víctor Mora con ganado por definir.

Alejandro Escárcega/Fotografía: Mario Aguilar/Facebook

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