La plaza
de toros de Valencia albergó un extraordinario espectáculo en la cuarta
de abono de las Fallas. Merced a un completísimo encierro de El
Parralejo, los seis sirvieron, la terna tuvo ante sí una oportunidad de
las de verdad. Para crecer en la profesión y dar un paso al frente.
Román, silencio tras aviso y ovación con saludos.
Francisco José Espada, silencio tras aviso y oreja tras aviso.
José Garrido, oreja y dos orejas.
Incidencias: Se guardó un minuto de silencio en memoria del veterinario Enrique Ezpeleta. El mayoral de la ganadería dio la vuelta al ruedo a la muerte del 5º y el 6º.
La aprovechó un pletórico José Garrido que con tres orejas y una completísima tarde, dio un aldabonazo muy serio y se convierte en el primer gran triunfador del ciclo.
Francisco José Espada logró cortar un trofeo del quinto, premiado con la vuelta al ruedo, al que cuajó muletazos reunidos y de buen gusto.
Por su parte, la espada traicionó a Román, que perdió el triunfo tras pinchar en la que era su despedida de novillero de la plaza de Valencia.
Plaza Toros de Valencia/Fotografía: Rullot/Plaza Toros de Valencia
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