28 de septiembre de 2012

Joaquín Hurtado se deshace de sus reses de lidia en Salamanca y Cáceres

El ganadero Joaquín Hurtado, que se inició como criador en los años ochenta, ha decidido deshacerse, "con mucha pena", de sus reses de lidia y también de las fincas de su propiedad ubicadas en Buenamadre (Salamanca) y en Coria (Cáceres) al no poder mantenerlas.

La dehesa La Ermita, en pleno Campo Charro y perteneciente al término de Buenamadre, la ha arrendado a un empresario de la provincia de Salamanca y en la operación ha vendido 140 vacas de vientre, de la afamada línea Lisardo Sánchez, procedente del encaste Atanasio Fernández.

Hurtado, que por asuntos personales ha decidido poner fin a su profesión, ha explicado hoy a Efe que esta ganadería de bravo apenas tiene futuro, ya que el comprador ha decidido "echarle el manso" a las vacas bravas.

Se pone fin así a uno de los escasos reductos de Lisardo Sánchez que aún sobreviven en la provincia de Salamanca y que Joaquín Hurtado adquirió a la familia Sánchez Urbina, titular de la ganadería Sepúlveda, afincada en Martín de Yeltes (Salamanca).

Joaquín Hurtado, exsenador y exalcalde de Coria (Cáceres), también ha puesto en venta, "por no poderla atender", las reses de encaste Marqués de Domecq que pastan en su finca cacereña de La Dehesa del Portezuelo, donde abundan las encinas y los alcornoques y en la que conviven 95 vacas de vientre ahora en venta.

Entre los sementales que más alegrías le han proporcionado, Joaquín Hurtado destaca el toro Balinero, de procedencia Lisardo.

Su último festejo, hace ahora un año, fue un festival celebrado en Malpartida (Cáceres), donde se cortaron ocho orejas y dos rabos.

Con este cese también cierran su andadura taurina los dos hierros de su propiedad: Herederos Rodríguez Percha -el salmantino- y Dehesa del Portezuelo -el cacereño-.

Texto: EFE

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Inserte su comentario