Buen encierro de Gilio y muchos avisos

Se fueron con las orejas puestas tres novillos del ganadero debutante en La México, Arturo Gilio, que merecían mejor suerte y sonaron seis avisos a cinco novilleros.

Plaza de toros Monumental de México, domingo 11 de agosto de 2013. Casi lleno. Se lidió un encierro de Arturo Gilio, bien presentado. Buenos el 1º, 2º, 3º y 6º.

Fue una tarde llena de emociones y de volteretas provocadas entre la bravura de los novillos de la ganadería de Arturo Gilio y, las carencias de los novilleros que sufrieron sendas volteretas, además de otros momentos de peligro que se vivieron cuando llovió en la plaza y el ruedo se tornó resbaloso. Estuvieron a punto de la cornada subalternos de la talla de Carlos Sánchez Torreblanca. Escena dramática la protagonizada por el banderillero Fernando "El Güero" García, cuando el sexto novillo se lo llevó colgado de un pitón metido bajo su casaquilla, durando varios segundos que debieron parecer horas, al llevar al subalterno de un lado a otro. Todos sus compañeros ayudaron al subalterno que salió con arañazos y golpes contusos que al terminar la novillada aún no se tenía el parte médico.

La tarde estuvo nublada durante los dos primeros novillos, luego algo de viento y lluvia que no terminó hasta el último, quedando resbaloso el suelo.

Abrió plaza el novillero Cristian Hernández con uno de los mejores novillos que tuvo clase, recorrido y buen son, mismo al que se le pudo sacar los mejores de la tarde. Pero falló con la espada y le sonó un aviso retirándose entre división de opiniones y palmas para el novillo.

El segundo espada, David Aguilar, tuvo un buen inicio con el capote y banderillas, siendo ovacionado. El viento se entrometió y el novillo se vino a menos, desarrollando peligro y llevándose Aguilar una voltereta. Con el estoque mal y de malas para recibir dos avisos, uno por haber levantado el puntillero al novillo.

Carlos Rodrígues se vio muy desconfiado al torear de capa al tercer novillo, que tuvo clase y recorrido. Algunos pases buenos le sacó con la muleta pero nada como para armar una faena. Varios pinchazos y media contraria para recibir un aviso. Palmas para el novillo.

Efrén Rosales recibió con buenas verónicas y al intentar un quite, resultó feamente volteado. De muleta inició bien pero el novillo fue desarrollando sentido y no pudo sacarle pases además de tener incluida otra voltereta. Finalizó toreando por la cara al novillo que lo buscaba. Pinchazo y media muy caída. Fue el único novillero que no oyó ningún aviso.

El colombiano Javier Martínez tuvo un buen inicio al torear de capa a la verónica y en un quite por chicuelinas antiguas. Banderilleó con facilidad. A la muleta el novillo llegó descompuesto y con poco recorrido, sacándoles algún pase bueno aislado. Estocada contraria y dos descabellos, escuchando un aviso.

Cerró plaza el novillo más cuajado, ya con cara de toro. El debutante Rodrigo Ochoa que sustituyó a Luis Ignacio, lo lanceó con el capote entre las piernas, siendo lo mejor un par de remates con media y su quite, una revolera. Vino la escena dramática del banderillero. Con la muleta Ochoa anduvo voluntarioso ante un bravo novillo que pronto fue aprendiendo. Sacó algunos pases buenos aislados que le fueron coreados. No se salvó de llevarse una voltereta y para su fortuna salió librado. Despachó de media caída y descabello, pero también escuchó un aviso.

Salir por su propio pie ya fue ganancia de los novilleros y los subalternos.

 

La México