En la
corrida de Feria en Santa Clara (México) se lidió un encierro de José
Julián Llaguno, bien presentado, con edad, peso y trapío, pero que
desgraciadamente resultó débil. Juan Luis Silis paseó una oreja.
El tercero de la tarde fue Joaquineto, número 5, negro bragado meano y capacho tocado del izquierdo. Verónicas de tercio a tercio y buen puyazo del varilarguero Eduardo Rivera,
el cual fue levantado por el toro con todo y cabalgadura. Con la
pañosa, doblones y un trincherazo para cartel, para recetarle dos series
de derechazos rematados con un pase de pecho de la cabeza hasta el rabo
y allí el toro cambió de lidia, volteando contrario y rajándose, por lo
cual cortó por lo sano. Tres pinchazos, estocada y descabello para
escuchar palmas.
El quinto fue Chicorio, numero 84, zaino y cornivuelto. Verónicas y al ser desarmado, brincó la barrera y regresó al albero para veroniquearlo cargando la suerte. Brindó al público feriante para realizar un trasteo a un toro noble pero débil. Finiquitó de media estocada y descabello para saludar en el tercio.
Juan Luis Silis (lila y oro) con Don Pepe, número 15, negro zaino y cornivuelto. Verónicas aguantando horrores. Brindó a todos para trastear a un toro con toda la barba, en una faena de mucho mérito. Con el acero perdió la oreja que ya tenía en la espuerta. Media y el estoque salió volando los aires, seis pinchazos y dos descabellos con un aviso entreverado para ser pitado.
Con Frascuelón, número 4, negro zaino y cornivuelto tocado del derecho. Verónicas y mandiles de recibo y quitó por ajustadas gaoneras. Buen par de banderillas de Christian Sánchez. Con la muleta, largos y templados derechazos y naturales ya no en el mismo tenor, porque el toro se vino a menos. Optó por regresar a muletearlo con la diestra. Y con la toledana, dos pinchazos, estocada y descabello con un aviso entreverado para saludar en el tercio.
Cerró el festejo con Buen Mozo, numero 73, negro zaino y cornidelantero. Larga cambiada de hinojos y de pie, mandiles caminándole del tercio a los medios y ahí, chicuelinas. Llevó hacia el caballo con chicuelinas andantes. Quitó Rivera con chicuelinas y le contestó Silis con gaoneras rematadas con una revolera. El sobresaliente Edgar Palacios hizo un quite por navarras y banderilleó. Silis, lo muleteó de hinojos y después muletazos a regañadientes a otro toro débil, metiéndose entre los pitones y ahora se fue con decisión tras el acero, dejando un estocadón hasta los gavilanes que hizo rodar al toro sin puntilla para cortar una merecida oreja que le otorgó el juez de plaza don Fabio de la Peña y su asesor, don Jorge Espinosa de los Monteros.
El quinto fue Chicorio, numero 84, zaino y cornivuelto. Verónicas y al ser desarmado, brincó la barrera y regresó al albero para veroniquearlo cargando la suerte. Brindó al público feriante para realizar un trasteo a un toro noble pero débil. Finiquitó de media estocada y descabello para saludar en el tercio.
Juan Luis Silis (lila y oro) con Don Pepe, número 15, negro zaino y cornivuelto. Verónicas aguantando horrores. Brindó a todos para trastear a un toro con toda la barba, en una faena de mucho mérito. Con el acero perdió la oreja que ya tenía en la espuerta. Media y el estoque salió volando los aires, seis pinchazos y dos descabellos con un aviso entreverado para ser pitado.
Con Frascuelón, número 4, negro zaino y cornivuelto tocado del derecho. Verónicas y mandiles de recibo y quitó por ajustadas gaoneras. Buen par de banderillas de Christian Sánchez. Con la muleta, largos y templados derechazos y naturales ya no en el mismo tenor, porque el toro se vino a menos. Optó por regresar a muletearlo con la diestra. Y con la toledana, dos pinchazos, estocada y descabello con un aviso entreverado para saludar en el tercio.
Cerró el festejo con Buen Mozo, numero 73, negro zaino y cornidelantero. Larga cambiada de hinojos y de pie, mandiles caminándole del tercio a los medios y ahí, chicuelinas. Llevó hacia el caballo con chicuelinas andantes. Quitó Rivera con chicuelinas y le contestó Silis con gaoneras rematadas con una revolera. El sobresaliente Edgar Palacios hizo un quite por navarras y banderilleó. Silis, lo muleteó de hinojos y después muletazos a regañadientes a otro toro débil, metiéndose entre los pitones y ahora se fue con decisión tras el acero, dejando un estocadón hasta los gavilanes que hizo rodar al toro sin puntilla para cortar una merecida oreja que le otorgó el juez de plaza don Fabio de la Peña y su asesor, don Jorge Espinosa de los Monteros.
Alberto Escarcega/Fotografía: Mundo Toca
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